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lunes, 21 de diciembre de 2009

Más nieve !!

Esta mañana me ha despertado mi hermana Laura antes de que me sonara el despertador:

-Elena, está nevando.

- ¿Qué le vamos a hacer?.

-No, si te lo digo porque Fran se acaba de marchar, para que tengas cuidado cuando te vayas a trabajar.

-Ok, me levantaré ya para salir antes de casa.

Eso ha sido mi conversación, a los tres minutos me he levantado de la cama, me he puesto la bata y he ido al comedor. Me he asomado por la ventana y estaba nevando, muy bonito eso de ver nevar.




Me he sentado en el sofá y me he puesto a ver el tiempo en la televisión, en ese momento ha llamado Fran para que mi hermana supiera que iba bien en la carretera y le hemos preguntado qué tal estaba (yo tenía que hacer parte de su recorrido cuando me fuese a trabajar); él ha dicho que a partir del tunel ya no nevaba, sino que estaba lloviendo.

Bien, pues me he arreglado para ir a trabajar y me he equipado con el paraguas, los guantes y el gorro de lana, yo hoy no pasaba frío. Para estar nevando no he notado que hiciera excesivamente frío asi´que me he subido al coche, he salido a la calle y me he dispuesto a conducir hasta mi trabajo.

Al volver la esquina y querer incorporarme a  la avenida principal, he metido primera, he acelerado el coche y, cual ha sido mi sorpresa que, el coche no se movía, estaba revolucionado pero no se movía, así que, como he podido me he desplazado hacia un lado y he parado el coche. He llamado a mi hermana Laura y le he dicho que por favor me ayudara, que necesitaba poner las cadenas porque el coche me patinaba.

No hemos tardado demasiado, teníamos las instrucciones en la caja (porque si me tengo que acordar de la explicación que me dio el señor que me vendió las cadenas, hace ya, casi tres años, seguro que no las ponemos). Además, una vez que las pasas por detrás de las ruedas y las enganchas por delante, ya no tiene vuelta de hoja, sólo tienes que ajustarlas y listo.

Estoy mogollón de orgullosa, ha sido la primera vez que he puesto unas cadenas en el coche, bueno la gran mayoría del trabajo lo ha hecho Laura pero yo he ayudado, que conste, y no hemos discutido, no nos hemos puesto nerviosas y encima lo hemos hecho muy bien. ¡¡FURUNDARENAS AL PODER!!

Después, cuando he querido salir del pueblo para coger la autovía, he tenido que dar la vuelta porque estaba la salida colapsada, he cogido el desvio hacia el polígono industrial para coger la autovía desde otro punto. Al ir acercándome cada vez más a la entrada de la autovía, he visto muchos coches apartados en el arcen, otros que se notaba que habían patinado porque estaban muy mal aparcados y las marchas de las ruedas estaban en la carretera y, el colmo de los colmos ha sido cuando he visto un coche, con tres tíos encima del capó, para que de ese modo las ruedas delanteras tuvieran agarre y pudiera seguir circulando ¡¡¡VAYA GANAS!!!

Después, una vez incorporada a la autovía ha sido todo tranquilo, independientemente de que se oía dentro del coche como si estuvieras subida a un avión, el ruido que hacen las cadenas es increíble, parecía que se desmontaba el coche, pero iba muy muy segura, eso sí, no he pasado de 70 Km/h durante todo el camino hasta llegar al trabajo. He llegado 45 minutos tardes  pero he avisado.

Y hasta aquí mi primera experiencia conduciendo bajo la nieve.

3 comentarios:

  1. Qué chulooooooooooooooo cari y qué envidia de las sanísimas ehhhhh
    Lo que hubiese dado por ver nevar así joooooooooooo. Aquí nos está haciendo un frío que pa qué, parecemos abuelicos encogidos jajajaja si hasta las yorkis no se separan de la estufica hasta el punto de que el domingo las sacamos como de costumbre (ya sabes que siempre están deseando salir como locas) y no veas que paso más acelerado llevaban. Luna iba conmigo y Keisha con Pedro. Lunita me miraba como diciendo “esto está muy bien y yo te lo agradezco pero ¿y si paseamos dando vueltas a la estufa?” En cuanto nos fuimos acercando a nuestra calle, no veas si aceleraron y, cuando estuvieron cerca de la puerta, se pusieron a lloriquear y dar saltos intentando empujar la puerta jajajajaja. Pedro y yo nos partíamos.
    El Puerto de la Cadena estuvo cerrado un tiempo el sábado y, yendo a casa de los papás, nos topamos con una quitanieves. Nos tendrías que haber visto a los dos, con los ojos como platos gritándonos en estéreo “ ¡¡¡¡ UNA QUITANIEVES !!!!. Ni siquiera sabíamos que tuviésemos algo de eso por aquí jajajajaja. La primera vez que veo una en directo jajajaja. Cualquiera que nos hubiese visto se preguntaría que de donde nos habíamos escapado jajajaja. Si ni siquiera tengo cadenas para el coche y jamás he colocado unas.
    Llevar cuidadico, abrigaros muy bien y cuidaros mucho bonica.

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  2. Hola, holitassssssss, sip soy yo de nuevo.
    Es que hoy he comido en casa de los papás y mamá me ha contado la última de Wendy, la yorki de la tía Ángeles. Para que te hagas una idea de las pelaeras que nos están cayendo, sobre todo es la puñetera humedad de estas tierras. Resulta que la tía fue a sacar a la perrita el otro día por la mañana. Ya sabes que siempre está como loca para salir a la calle. La tía no paraba de intentar que la perra saliera de casa y por más que le decía que saliese, la otra le decía que naranjas de la china. Venga a tirar de ella y ni por esas. La perrita le decía que hacía demasiado frío. En esto que llega el del periódico para dejarle en la puerta a sus suegros el mismo. La perra que ve esto y, sin que a la tía le diese tiempo a reaccionar, allá que se lanza Wendy a la carrera, sale por la puerta, se coloca sobre el periódico y allí que orina, volviendo como alma que lleva al diablo para su casica de nuevo. La tía no daba crédito: "mírala no hay manera de que eso lo haga en los periódicos de casa, ni en el pipican y ahora..." jajajajaaja La perrica debió pensar, tu que quieres, que salga para orinar pues ale, ya he salido, pero a la intemperie ni hablar. Y eso que la tía la lleva con ropica de abrigo y todo jajajaja. Cuando me lo contaba mamá, me ahogaba jajajaja.

    Os quiero muchísimo. Besicossssssssssssssssss.

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  3. Hola!!!!!
    Nos lo contó mamá cuando nos llamó por teléfono, la verdad es que si lo llega a ver Laura se parte de la risa, vamos que le entra el hipo ese que no para, jejeje. La cara de la tía tuvo que ser un poema, pero .... ¿Y lo a gusto que e quedó Wendy? jajaja.

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